Las lagartijas son un excelente ejercicio para la salud, ya que el trabajar todo tu cuerpo tendrá beneficios cardiovasculares; las flexiones no solo funcionan como acondicionamiento físico, sino que incluyen grandes beneficios para el organismo.
El enfoque principal de las lagartijas son los músculos de tu pecho, brazos y hombros, pero el ejercicio también requiere fuerza central. A medida que avanzas, los músculos de tu torso trabajan para mantener tu cuerpo estable y en línea.
Tus músculos abdominales deben estar activos para mantener la forma adecuada durante una lagartija, por lo que no solo tu salud será beneficiada, sino que pueden ayudar a mejorar tu postura con el tiempo. La fuerza central juega un papel en la estabilidad, el equilibrio y la postura de tu cuerpo.
Los ejercicios funcionales como las lagartijas benefician la salud general de tu corazón, aunque debes complementarlo con movimientos de cuerpo completo con otros ejercicios como sentadillas para obtener los máximos beneficios.
Al realizar una lagartija trabajamos varios músculos al mismo tiempo, el cual puede ayudar a fortalecer los músculos del pecho, la espalda, los tríceps, los bíceps y los músculos de la parte superior de la espalda.
Eso sí, hay que tener cuidado con los ejercicios, ya que realizar las lagartijas con poca forma o intensidad excesiva puede causar dolor y lesiones, así como realizarlas durante demasiado tiempo o aumentar tus repeticiones demasiado rápido también puede ser una fuente de uso excesivo, así que para evitar posibles lesiones, debemos alternar cada día entre los ejercicios de la parte superior del cuerpo y de la parte inferior del mismo.