La Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural, en conjunto con la Comisión Nacional de Zonas Áridas y la Defensa Nacional, dieron inicio con el bombardeo de nubes, un proyecto para estimular las lluvias en el Sistema Cutzamala, con el fin de mitigar los efectos de la sequía en el Valle de México. El programa se lleva a cabo en un área de impacto en las presas Cutzamala, Valle de Bravo y El Bosque, cubriendo más de 438 mil hectáreas.
¿Bombardear nubes para recibir lluvia? ¡Descubre cómo es el proceso!
Cabe destacar que el proyecto se aplicará del 28 de marzo al 7 de mayo e inició desde el pasado lunes 27 de marzo con la instalación de equipos y ubicación de reactivos con los que se trabajará en el polígono que comprende Estado de México y parte de Michoacán.
Bombardeo de nubes: ¿Qué utilizan para estimular la lluvia?
Se utiliza una combinación de yoduro de plata y acetona para crear un químico recursivo que se asperja en las nubes con el fin de estimular la lluvia en áreas específicas. Este programa lleva tres años en operación y ha logrado un aumento del 25 al 45 por ciento en la precipitación de lluvias, lo que beneficia a los productores agropecuarios en zonas desérticas del norte del país.
¿El bombardeo de nubes tiene un impacto negativo en el medio ambiente?
Por otra parte, es importante destacar que la aspersión del químico no causa ningún impacto ambiental ni contamina el agua, ya que está compuesto por minerales y sal.
¿En qué estados se ha empleado el bombardeo de nubes?
La tecnología utilizada para estimular la lluvia en áreas desérticas retoma un desarrollo que comenzó hace más de 40 años con el agrónomo Manuel Menéndez Osorio. Después de mejoras significativas en la fórmula química, el proyecto fue liberado en 2019 y se inició en 2021 en una región de Baja California, logrando resultados notables. Esto impulsó la implementación de proyectos en las zonas desérticas de Sonora, Sinaloa, Chihuahua y un proyecto conjunto para los semidesiertos de Coahuila, Durango y Zacatecas en el verano del mismo año.
En 2022 se incluyeron más zonas desérticas, como Baja California, Sonora, Sinaloa, Chihuahua y la zona sorguera de Tamaulipas y Nuevo León. En 2023, la tercera temporada de estimulación de lluvias comenzó con la ayuda de aeronaves de los gobiernos de Sonora, Sinaloa, Nuevo León y Tamaulipas. Y hasta el 11 de marzo, se han realizado 250 misiones de vuelos de estimulación.